Esta semana, el Gobierno presentó en el Consejo de Ministros, con unos cuantos meses de retraso, el techo de gasto y el cuadro macro, que suelen ser la antesala de los Presupuestos Generales del Estado. Quizá por la expectación que ha despertado la posibilidad, aunque remota, de tener Cuentas Públicas para 2026, ha quedado en segundo plano otro asunto aprobado en la misma reunión por el Gobierno, este de calado sanitario: el acuerdo por el que se inicia el proceso -algo así como un ‘casting’- para elegir el municipio que albergará la futura Agencia Española de Salud Pública. Por tanto, cinco años después de la pandemia, se abre la carrera para albergar un organismo que en esos meses se demostró muy necesario. No sólo Zaragoza -ciudad aragonesa, como el candidato a dirigir la agencia, Fernando Simón– sino también Barcelona, Granada, León, Oviedo y Lugo han mostrado ya interés por acoger esta entidad. Habrá que ver en la convocatoria qué criterios se establecen y cómo se justifica la elección final. También, cómo se tomarán los funcionarios del actual Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias del Ministerio de Sanidad, el cambio de nombre y de ubicación.
Primera misión: gripe aviar
Dondequiera que se establezca finalmente la Agencia de Salud Pública, parece que no le va a faltar el trabajo desde el primer día. La crisis de la Covid-19 quedó atrás hace mucho, pero la amenaza de una nueva pandemia no ha dejado de planear. La que esta temporada asusta más es la gripe aviar que, de momento, ya se ha convertido en “panzootia”. Esto significa que, mientras los humanos hacemos vida normal en este 2025, las gallinas y pollos ya viven su particular confinamiento. Más allá de los efectos de este virus en el precio de productos como los huevos, existe un riesgo real, aunque bajo, de contagio a humanos. Ya se han documentado cerca de un millar. De momento, parece que el riesgo de que el virus mute y se transmita entre humanos no es elevado, con lo que el virus no se ha vuelto pandémico. Pero la posibilidad existe. Y los que subestimaron un virus hace cinco años no quieren que les vuelva a pasar. Un caso claro que muestra la necesidad del enfoque ‘One Health’ en la salud del futuro.
¡Qué titulares tan emocionantes! Me encanta que estemos ya eligiendo el cast para la Agencia de Salud Pública. ¡Tendremos que ver si acaban eligiendo Zaragoza por el candidato o por su famosa cerveza! Mientras tanto, mejor prepararse para todo: desde la gripe aviar (¡una panzootia!) hasta los misterios de la felicidad juvenil. ¡Viva la salud pública, aunque sea con un toque de humor y un poco de One Health!