La aplicación de las nuevas tecnologías en entornos laborales es, desde hace ya muchos años, una realidad, especialmente en el sector terciario donde se produce el mayor número de aplicaciones informáticas. Así, en la actualidad son muchas las personas que trabajan ocho horas al día delante de un ordenador.
Pero, además, en nuestro tiempo libre cada vez estamos más inundados de pantallas (smartphones, tablets, ordenadores…) y nuestro ocio también se concentra en buena medida en torno a ellas, bien sea para ver series o películas, jugar a videojuegos o bucear por Internet, entre otras muchas actividades.
El uso continuado de estos dispositivos fijando la vista en la pantalla puede favorecer la aparición de la enfermedad conocida como el Síndrome de la Pantalla de Visualización (SPV), llamado también coloquialmente como el “síndrome del ordenador” que provoca principalmente fatiga visual, la cual puede verse aumentada por un entorno inadecuado.
Esta enfermedad se suele manifestar en tres niveles diferentes: molestias oculares (ojo seco, cansancio, picor, enrojecimiento y dolor de ojos), trastornos visuales (dificultad para enfocar, fotofobia o molestias ante la luz) y trastornos extra visuales (dolor de cabeza o incluso mareos).
Consejos para evitar la fatiga ocular
Hoy en día se considera que una persona es “trabajador con pantallas de visualización” cuando pasa una parte relevante de la jornada laboral delante de un ordenador o cualquier tipo de pantalla electrónica. Sin embargo, según indica el Instituto Nacional de Salud y Seguridad en el Trabajo “es difícil establecer este baremo basándolo exclusivamente en el número de horas diarias, ya que además de la frecuencia de uso y duración, se deben valorar también la intensidad y ritmo de trabajo”.
En cualquier caso, hay que cuidar los ojos e intentar evitar la fatiga visual y, para ello, es importante tener en cuenta una serie de medidas preventivas:
- Descansos regulares: poner en práctica la regla 20-20-20 (cada 20 minutos, quitar la vista de la pantalla y mirar a unos 20 pasos de distancia durante 20 segundos).
- Ajustar la iluminación: ajustar el contraste y el brillo del ordenador y que la iluminación ambiental sea correcta (evitando posibles reflejos en la pantalla).
- Distancia adecuada: lo ideal es que la pantalla del ordenador esté a unos 50-70 centímetros de distancia y ligeramente por debajo de la línea de visión.
- Aumentar el parpadeo: mirar fijamente a la pantalla hace que se reduzca el parpadeo, lo que puede causar sequedad ocular.
- Lentes y gafas con protección: para aquellas personas que necesiten lentillas o gafas es importante que estas tengan protección contra la luz azul de la pantalla, ya que ayuda a reducir la fatiga ocular.
- Ejercicios e hidratación para los ojos: mover los ojos en círculos, hacia arriba y hacia abajo, y enfocar objetos cercanos y lejanos para ayudar a relajar los músculos oculares, así como utilizar lágrimas artificiales para tratar la sequedad.
Siguiendo estos consejos, en BERBĒS nos preocupamos por las personas que forman nuestro equipo y por ello favorecemos un entorno óptimo de trabajo en beneficio de la salud.