Cada año se realizan en España más de un millón y medio de donaciones de sangre y cada una de ellas puede llegar a salvar hasta tres vidas. Miles de personas dependen de transfusiones debido a cirugías, tratamientos oncológicos, accidentes o enfermedades. La necesidad de sangre es constante, especialmente a principios de año, tras el periodo navideño, cuando los bancos alcanzan sus niveles mínimos de reserva.
En estas fechas, es esencial fomentar la cultura de la donación entre la población y promover campañas y maratones para donar sangre, con el fin de garantizar el suministro a hospitales y centros de salud. Por eso, desde BERBĒS respondemos a las preguntas frecuentes de quienes valoráis convertiros en donantes de sangre y os animamos a hacerlo. Porque cada donación cuenta, y cada gesto solidario puede marcar la diferencia en la vida de alguien.
Ser donante es muy fácil ya que se trata de un proceso sencillo, indoloro y rápido, que apenas dura 20 minutos. Cualquier persona que tenga entre 18 y 60 años (65 en el caso de ser donante habitual), pese más de 50 kilos y esté bien de salud puede donar sangre después de completar un cuestionario de filiación y preguntas de salud. Las mujeres pueden hacerlo un máximo de tres veces al año, mientras que los hombres pueden llegar a las cuatro veces, siempre que entre donación y donación transcurra un mínimo de dos meses. Entre los motivos más habituales de descarte están los viajes recientes fuera de la Unión Europea, las cirugías invasivas o medicaciones contraindicadas.
¿Cómo se usa la sangre donada?
En cada donación se extraen 450 centímetros cúbicos de sangre, que se analizan para garantizar que cumple con las garantías óptimas, descartar enfermedades como el VIH, sífilis y hepatitis B y C, y confirmar el grupo sanguíneo del donante, que puede ser A+, A-, B+, B-, AB+, AB-, O+ y O-. Las personas de este último grupo (O-) pueden donar sangre a cualquier persona, son donantes universales, pero solo pueden recibir de otro O-; los del grupo AB+, por su lado, son receptores universales.
La sangre donada se divide en tres componentes: hematíes —glóbulos rojos—, plasma y plaquetas, que se transfunden a cada paciente en función de sus necesidades. Los glóbulos rojos suelen usarse en las intervenciones quirúrgicas, hemorragias o trasplantes de órganos; las plaquetas se utilizan en pacientes con cáncer o leucemias, así como trasplantes de médula ósea; por último, el plasma es la parte líquida de la que se obtienen una serie de proteínas para tratar enfermedades crónicas, infecciones o grandes quemaduras.
La donación en España
A pesar de que España cuenta con un sistema de donación de sangre bien establecido, la demanda supera en ocasiones las reservas almacenadas en los bancos de sangre. Según datos del Ministerio de Sanidad, se requieren aproximadamente 5.000 donaciones al día para atender las necesidades de los hospitales. Sin embargo, muchas veces las campañas de donación no logran alcanzar esta cifra. Como informan en Cruz Roja desde su página web, una de cada dos personas residentes en España necesitará una donación de sangre alguna vez en su vida, y una de cada diez personas ingresadas en el hospital necesita sangre. Sin embargo, tan solo el 5% de los posibles donantes da sangre al año.
Por eso es importante visibilizar las campañas de donación. Ejemplo de ellas es “Dona Sangre, Dona Vida”, que se realiza anualmente en diversas ciudades españolas. Esta iniciativa busca sensibilizar a la población y desmitificar el proceso de donación. A través de charlas informativas, testimonios de receptores de transfusiones y actividades lúdicas, se invita a la ciudadanía a participar en esta causa solidaria. Desde BERBĒS, te invitamos a informarte sobre cómo y dónde donar sangre en tu localidad. Tu sangre puede salvar vidas y es esperanza para los demás.
