La semana sanitaria comenzó con el primer Consejo Interterritorial del curso político, último, casi con total seguridad, del ministro Miñones, y primero para muchos de los consejeros autonómicos. Habría sido la noticia de la semana si no fuera por el bajísimo perfil que se le dio a la reunión: no sólo los asuntos tratados fueron de puro trámite (es necesario convocar, al menos, una vez al trimestre, para distribuir fondos entre las CC AA y avanzar en la trasposición de directivas europeas), sino que ni siquiera se distribuyó una foto a medios de la cita, algo inédito. Pero es que a nadie se le escapaba que el protagonismo político llegaría a mediados de la semana con la sesión de investidura de Pedro Sánchez en el Congreso. Una sesión en la que la sanidad estuvo ausente durante la mayor parte del tiempo, pues el candidato prefirió centrarse en temas más rentables políticamente, como la sostenibilidad. Le dio tiempo, sin embargo, a proponer un Plan de Listas de Espera. Como ocurre casi siempre en Sanidad, es difícil prometer algo cuyas competencias no estén en manos de las CC AA, y éste es el caso, por lo que se antoja complicado, desde el Gobierno central, poder intervenir en este asunto.
Nombres propios: Mónica García
Pocas veces, en las últimas décadas, una “ministrable” de Sanidad ha sonado tanto en los días previos al nombramiento. La parte de Sumar del nuevo Gobierno de coalición se ha encargado de desgranar nombres para los cinco ministerios que aspira a liderar y, el que se repite siempre, es el de la líder de Más Madrid. Médico anestesista de profesión, a Mónica García ya la sitúan todas las miradas en el Paseo del Prado, 18, de donde ya recoge sus cosas el disciplinado José Miñones, que ha cumplido su misión en estos meses, tanto de cara al sector como en el plano político, apoyando a su partido en las campañas electorales, sin hacer ruido. Veremos si ésta es la tónica con la primera ministra de Sanidad del “espacio” a la izquierda del PSOE desde Federica Montseny.
Para los próximos días…
En los próximos días, los ministros del nuevo Gobierno tomarán posesión de sus carteras, incluida Sanidad. Habrá que ver qué otros miembros del Ejecutivo tendrán competencias relacionadas con la salud, si Sanidad lleva “apellidos” y si se mantiene el Ministerio de Ciencia e Innovación en un Gobierno que se ha anunciado que tendrá menos carteras.
