Cada año, el viernes anterior al equinoccio de marzo (18 de marzo en 2022) se celebra el Día Mundial del Sueño, auspiciado por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño y este año se ha celebrado bajo el lema “Sueño de calidad, mente sana, mundo feliz”
Según datos de la Sociedad Española de Neurología, más de 12 millones de españoles duermen mal. Además, a esta cifra hay que sumarle 4 millones de personas de nuestro país que padecen algún tipo de trastorno del sueño crónico y grave. La World Sleep Society estima que hasta el 45 % de la población mundial padecerá en algún momento algún trastorno del sueño grave. Es por ello que los trastornos del sueño son una epidemia global que amenaza seriamente la salud y la calidad de vida de quienes los sufren.
Sueño de calidad: las claves
- Duración: la suficiente para sentirnos descansados al día siguiente (entre 7 y 9 horas en adultos)
- Continuidad: sueño estable y sin fragmentación
- Alcanzar fases de sueño profundo: implican un descanso más reparador.
Sueño de calidad: consejos
- Mantener unos horarios y rutinas regulares para acostarse y levantarse es fundamental.
- Hacer ejercicio físico
- Realizar cenas ligeras
- En caso de dormir siesta que el tiempo no exceda de 20-30 minutos
- Evitar tóxicos como el alcohol o el tabaco y reducir la cafeína, sobre todo unas horas antes de acostarse
- No utilizar durante un tiempo largo antes de ir a dormir dispositivos móviles, uso de ordenador. La luz brillante que emiten las pantallas de los televisores tampoco ayuda aconciliar el sueño.
El sueño está involucrado en numerosos procesos fisiológicos, por lo que una mala calidad del sueño se relaciona con problemas de salud: aumento de riesgo de mortalidad por eventos cardiovasculares, problemas metabólicos como diabetes y obesidad, disfunciones neurocognitivas, problemas de salud mental, etc. y los trastornos del sueño más habituales entre la población española son, entre otros, el insomnio, que es el más frecuente (entre el 25-35% de la población adulta lo padece), la apnea obstructiva del sueño, trastornos de ritmo circadiana, síndrome de piernas inquietas, la narcolepsia. Si aparece cualquier indicativo de que podríamos padecerlos, lo mejor es ponerse en manos de un especialista