Este 2023 arranca tras dos años en los que la tecnología ha sido clave en el ámbito sanitario. Desde la pandemia de Covid-19 la telemedicina ha experimentado un increíble incremento, siendo la atención primaria la que más ha demandado de ella para mejorar la calidad de vida de los pacientes. Sin embargo, no se ha quedado ahí y las consultas virtuales se han expandido a otras áreas y especialidades, que han visto en la teleasistencia un elemento fundamental para monitorizar a personas con patologías crónicas.
En este sentido, la compañía de tecnologías de la información Inetum reveló en un estudio que calcula que durante 2023 el 75% de los pacientes utilizarán las consultas de telemedicina. Así, parece ser que es una tendencia que ha llegado para quedarse y que cada vez cubre más necesidades.
La Inteligencia Artificial es otra de las piedras angulares de los avances tecnológicos en salud, ya que facilita al diagnóstico y tratamiento de enfermedades, supone una ayuda fundamental para los profesionales sanitarios y es clave en el tratamiento de datos a gran escala.
Aunque el uso de la Inteligencia Artificial ha crecido en los últimos años en el análisis de imagen y modelos de enfermedades, su impacto en las personas todavía es bastante limitado, tal y como declaró la Organización Mundial de la Salud (OMS) en uno de sus últimos estudios sobre este tema. En concreto, reconoce que el uso de esta tecnología se centra, básicamente, en laboratorios y desarrollo de pruebas. Sin embargo, se augura un desarrollo de la Inteligencia Artificial en salud, lo que, según la OMS abre nuevas oportunidades para monitorear la salud y combatir las enfermedades no transmisibles.
El mayor reto para el avance de la tecnología en el campo de la salud es la formación de los sanitarios en este aspecto. En este sentido, es importante actualizar los conocimientos y habilidades de los profesionales de este ámbito, de manera que la tecnología progrese a la vez que se capacita a las personas encargadas de utilizarlas y, siempre, teniendo en cuenta la necesidad de los pacientes de mejorar su calidad de vida.