En los próximos días se cumplen dos años del inicio oficial de la pandemia en España. Esos días previos al estado de alarma de 2020 fueron los que empezaron a cambiar las vidas de todos, vidas que aún no han vuelto a 2019, por más que se ha intentado después de cada ola. Pero, con motivo de esta efeméride, las autoridades sanitarias en España, y también otras fuera de nuestras fronteras, han querido dar el penúltimo carpetazo a la crisis de la Covid-19
Cumbre en Zaragoza para “gripalizar” la Covid-19
Para formalizar este punto y aparte, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, llevaba varias semanas preparando la cumbre celebrada este jueves en Zaragoza con los consejeros del ramo. No es un interterritorial, se apresuraron a aclarar fuentes del Ministerio, sino unas “jornadas”. No está claro si el cambio de nomenclatura, después de más de un centenar de consejos, se debe a que no se pretendía votar, si preferían no levantar acta que luego habría que difundir a través del portal de transparencia, o simplemente es un paso más hacia la “gripalización” del SARS-CoV-2, pero todas las decisiones adoptadas, incluidas en la “Declaración de Zaragoza” van encaminadas a este fin. Como anunció Darias, la información sobre incidencia se reducirá a dos informes semanales, frente a los cinco actuales, y se vigilarán sólo los casos graves. El documento aprobado no incluye novedades sobre mascarillas, pero, como apuntó el presidente del Gobierno, las mascarillas desaparecerán en interiores “muy pronto”, seguramente esta misma primavera, aunque se mantendrán excepciones (algo que estos días han pedido consejeros como los de Madrid, Cataluña, Andalucía…). En definitiva, diremos adiós a la “fase aguda” de la pandemia y nos resignaremos a convivir con este virus, armados con vacunas, tests de antígenos y tratamientos hospitalarios. Quizá algunos aspiren a más, pero puede que esto sea lo más parecido al titular “La pandemia ha acabado” que todos ansiaban leer en 2020.
Europa se despide de las restricciones
Algunos de los países llamados “de nuestro entorno” recorren caminos similares estos días. Este lunes, 14 de marzo, Francia dirá adiós a las mascarillas en interiores. También al pasaporte covid, un elemento que había sido objeto de acalorados debates en el país galo en los últimos meses y que, sin embargo, al llegar a su fin ha pasado casi desapercibido. Además de Francia, este lunes su vecina Bélgica ha optado por medidas similares y, en las últimas semanas, lo han hecho países como Dinamarca, Reino Unido, Noruega, Suecia Finlandia, Austria o Suiza. En todos ellos, también en España, el fin de las restricciones, esta vez, no ha tenido el protagonismo esperado, por causa, cómo no, de la guerra en Ucrania que, en pocos días, ha remplazado el grueso de la información pandémica.