Con estado de alarma o sin él; con o sin “toque de queda”, expresión que a muchos, como al ministro de Fomento, “horroriza”, parece claro que no es buena idea salir de noche en los próximos días. Tampoco lo es hacer una de esas escapadas de fin de semana que eran tan comunes en estos meses de otoño en la antigua normalidad. Como repitió en una decena de ocasiones el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, en su última comparecencia junto con la presidenta de la Comunidad para hablar de la pandemia, “no estamos para fiestas”. O, más en general, España, hoy, no es país para fiestas.
Esta semana hemos llegado al récord no por previsible menos escalofriante de un millón de contagiados por COVID-19 en nuestro país. Se trata de diagnósticos confirmados por PCR, y todos los expertos coinciden en que probablemente los reales serán muchos más: entre tres y cinco millones. Con ello, España se sitúa como primer país en Europa en contagios, por delante de otros más poblados o mucho más extensos. Sin embargo, esta cifra no parece acercarnos a ninguna suerte de inmunidad de grupo y la situación sigue siendo muy preocupante.
Tanto, que esta semana, por fin, las CC AA se han puesto de acuerdo con el Ministerio en adoptar medidas comunes con base en un documento que clasifica los municipios en función de su riesgo: extremo, alto, medio, bajo y “nueva normalidad”. De momento, ocho CC AA debutan en riesgo extremo o alto. El documento, además, plantea “salir sólo lo necesario”, aunque renuncia a cerrar la hostelería.
Mientras se estudia cómo será su puesta en práctica, este fin de semana parece que va a ser bastante casero en todo el país:
- Dos CC AA completas (Navarra y La Rioja) y más de 50 municipios en España permanecen bajo confinamientos perimetrales. Entre ellos, 10 capitales de provincia: A Pamplona y Logroño hay que unir Madrid, Palencia, León, Salamanca, Burgos, Teruel, Huesca y Zaragoza.
- Con ello, 7,6 millones de ciudadanos en España están confinados, sin poder salir de su localidad salvo por excepciones justificadas.
- Además, más de 2.200 municipios sufren restricciones adicionales de algún tipo relacionadas con la evolución de la pandemia.
Conclusión
En definitiva, un panorama que se complica. En medio de esta situación, la ciencia da pasos adelante y atrás, pero se consolida como la mayor esperanza para salir de esta situación en algún momento.
